Como el tiempo de admisión es
demasiado breve, los gases de mezcla fresca dentro del
cilindro nunca alcanzan el valor de la presión atmosférica.
Comparando dos motores iguales, el que sea capaz de llenar
en mejor forma sus cilíndros será el más
eficiente.
Se denomina
rendimiento
volumétrico al porcentaje de presión
de llenado de un cilindro. Por ejemplo, si la presión
barométrica es de 1.000 milibares, el motor tendrá un
80% de rendimiento volumétrico cuando los gases
en sus cilindros alcanzan una presión de 800 milibares,
antes de comenzar la carrera de compresión. Entre
dos motores iguales, el que tiene mayor rendimiento volumétrico
genera más potencia puesto que dispone de mayor
número de moléculas de oxígeno que
le permiten quemar mayor cantidad de combustible.
Los sistemas de admisión de motores para vehículos
de calle, se diseñan de manera que el rendimiento
volumétrico máximo se alcance a velocidades
medias de alrededor de 3.000 a 4.000 RPM. Cuando el llenado
de los cilindros es máximo entonces el torque es
máximo. Esto último
no
significa que su potencia sea máxima.